Vediau. El altavoz de Unitat d’Aran.

Autor: Unitat d’Aran

  • La Casa en Flames

    La Casa en Flames

    Este filme, de Dani de la Orden de 2024, es un viaje íntimo hacia la resiliencia y la búsqueda de la felicidad a través de la complejidad familiar y personal.

    Montse, una mujer divorciada y con dos hijos que le han ignorado durante años, se prepara para un fin de semana de reunión familiar en la casa de la Costa Brava. Con toda su energía y cuidado, enfrenta las heridas del pasado y la distancia emocional que la vida adulta ha impuesto entre ella y su familia. Con el único objetivo de disfrutar del fin de semana en familia, aunque tenga que quemar toda la casa.

  • Protegemos el paisaje aranés y fomentamos el desarrollo territorial sostenible

    Protegemos el paisaje aranés y fomentamos el desarrollo territorial sostenible

    El Conselh Generau d’Aran ha aprobado por unanimidad una modificación de las Normas Subsidiarias de planeamiento (NNSS), en vigor en seis municipios del territorio, para regular los usos y edificaciones admisibles en suelo no urbanizable. Esta actualización normativa no sólo responde a problemáticas detectadas en los últimos años, sino que supone un paso adelante en el modelo de organización territorial que Aran quiere liderar: limpio, ordenado, respetuoso con el medio natural y alineado con las estrategias europeas en materia de sostenibilidad.

    La modificación permitirá compatibilizar el respeto por el paisaje con la necesidad de adaptar los espacios rurales a los retos actuales. Entre los principales avances, destaca la posibilidad de regular nuevas construcciones relacionadas con la actividad agropecuaria en parcelas de más de 2.000 m², una medida especialmente importante para ayudar al sector pagés y facilitar el relevo generacional en este oficio. También se introducen nuevos criterios para evitar la proliferación de construcciones improvisadas y sin integración paisajista, fomentando en su lugar intervenciones coherentes, armonizadas y respetuosas con el entorno.

    Esta iniciativa forma parte de una hoja de ruta más amplia: construir un modelo de desarrollo territorial basado en la sostenibilidad, la eficiencia y el compromiso con las futuras generaciones. En este sentido, la norma contempla también aspectos claves como la gestión de movimientos de tierras, la implantación ordenada de energías renovables (como paneles solares), y la creación de una ficha técnica orientativa que facilitará tanto la tramitación administrativa como el control y seguimiento de las actuaciones.

    En este marco, la reciente declaración de la Val d’Aran como Reserva de la Biosfera por la UNESCO, obtenida en 2024, constituye un reconocimiento internacional al esfuerzo colectivo del territorio por preservar su entorno natural, su cultura y sus formas de vida tradicionales. Esta nueva norma consolida este compromiso, dotando a los ayuntamientos araneses de claros instrumentos jurídicos para gestionar el territorio de forma eficaz y sostenible.

    Esta regulación representa un cambio de paradigma en la forma en que cuidamos y planificamos el territorio. Se trata de mirar al futuro con responsabilidad, respetando lo que somos y apostando por un modelo de desarrollo que mete la vida en el centro: las personas, el paisaje y la sostenibilidad.

    Con esta medida, Aran avanza en la consolidación de un modelo propio de gestión territorial, que pone en valor su singularidad, fortalece el mundo rural y responde a los retos globales con soluciones locales, sostenibles e inclusivas.

  • Aran educa en sostenibilidad: compostadores escolares y educación ambiental

    Aran educa en sostenibilidad: compostadores escolares y educación ambiental

    La sostenibilidad debe ser uno de los ejes centrales en el desarrollo de nuestro territorio. Apostar por un Aran verde, resiliente y comprometido con el medio ambiente es también apostar por el futuro de nuestros jóvenes. Gracias al impulso del gobierno de UA en el Conselh Generau d’Aran y a la financiación europea obtenida a través de los fondos Next Generation EU, esta visión se materializa con proyectos concretos como la instalación de compostadores comunitarios en las escuelas Sant Roc de Bossòst y Garona de Vielha.

    El compostaje escolar no sólo mejora la gestión de residuos orgánicos en los centros educativos; también representa una herramienta pedagógica fundamental para transmitir valores de respeto al entorno y cultura de sostenibilidad entre los más jóvenes. ecológica, trabajando conjuntamente con la Escòla Aranesa en la transmisión de los valores ambientales.

    Los compostadores ubicados son adaptados al entorno escolar y permiten obtener compuesto de alta calidad en pocos días, cerrando el ciclo de la materia orgánica dentro del propio centro. En Vielha, incluso se incorporan los restos generados en el comedor escolar, mostrando una apuesta clara por la economía circular.

    Es necesario remarcar que los residuos orgánicos mal gestionados suponen uno de los principales retos climáticos del presente. Según la ONU, representan entre el 8 y el 10% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero. A través del compostaje, reducimos estas emisiones, evitamos el uso de fertilizantes químicos y recuperamos nutrientes de alto valor para el suelo.

    Comprendemos que construir un modelo de desarrollo respetuoso con el entorno comienza por la educación, y que sólo con una ciudadanía formada y consciente podremos enfrentar los retos climáticos del presente y del futuro. Apostamos por políticas ambientales ambiciosas que integran innovación, pedagogía y compromiso institucional.

    Trabajamos para que Aran sea un ejemplo de territorio sostenible, dónde el paisaje se cuide desde las aulas, donde cada acción cuenta en la lucha contra el cambio climático. Aran, un territorio sostenible ambiental, económica y socialmente.

  • ¿Por qué celebramos la Hèsta d’Aran?

    ¿Por qué celebramos la Hèsta d’Aran?

    La Hèsta d’Aran es la fiesta nacional de Aran, esta se celebra anualmente el 17 de junio desde el 1991. Esta fecha marca el restablecimiento, después de siglo y medio, de la máxima institución aranesa y de su autogobierno, qué vienen a raíz de la concesión de los derechos históricos de la Querimònia en el año 1313, otorgados por el rey Jaime II de Aragón.

    En las próximas líneas viajaremos desde aquella fecha hasta hoy para entender la importancia de esta conmemoración y poner en valor el trabajo llevado a cabo por los ciudadanos y ciudadanas de Aran para recuperar el Conselh Generau d’Aran.

    Era Querimònia (1313), la carta magna d’Aran

    Durante la Edad media, Aran tuvo un papel importante por su posición geográfica singular. Una singularidad dada por su lengua propia, el aranés, por la posición geográfica como zona de frontera y posición estratégica, como por la orografía de su territorio.

    En el año 1313 Aran se incorporaba definitivamente a la Corona de Aragón bajo el reinado de Jaime II de Aragón. El rey otorgó a los araneses y aranesas entonces el conjunto de privilegios y derechos conocidos como “Era Querimònia”, considerada la verdadera Carta Magna de Aran. Este documento fue concedido el 23 d’agosto de 1313 y permitió importantes exenciones económicas y total autonomía en la gestión local aranesa.

    Desde entonces, los araneses se gobernarían a través del Conselh Generau d’Aran medieval. El Conselh era integrado por respresentantes de las subdivisiones históricas de Aran, los «terçons». Estos representantes eran escogidos por las comunidades locales. Al frente del autogobierno aranés se encontrara la figura del Síndico de Aran. Este sistema otorgaba a Aran una notable autonomía local en la administración de justicia, en la gestión de bienes comunales entre otras áreas, y todo bajo la soberanía de la Corona de Aragón.

    Los derechos adqueridos en 1313 fueron confirmados y ratificados por los monarcas sucesivos aragoneses y españoles, incluyendo los Reyes Católicos y los Austrias. La Querimònia fue ratificada por todos los reyes hasta Fernando VII en el siglo XIX. Este compromiso por la autonomía aranesa permitió que sus habitantes disfrutaran los derechos y privilegios durante más de cinco siglos.

    Siglo XIX: la abolición del Conselh Generau d’Aran

    A comienzos del siglo XIX permanecieron suprimidas las viejas instituciones aranesas. El histórico Conselh Generau d’Aran fue abolido oficialmente en 1834 bajo la regencia de María Cristina, perdiendo los privilegios otorgados en el 1313.

    Esta medida hizo que Aran fuera integrada administrativamente en la provincia de Lleida, disolviendo la organización territorial propia d’Arán, los terçons, y sustituyéndola por una división municipal ordinaria. A partir de entonces, el gobierno de Aran quedó en manos de las autoridades provinciales y estatales.

    Sin autogobierno reconocido los alcaldes araneses siguieron su labor de forma voluntaria en la «Junta d’Alcaldes», trabajando en la defensa de la identidad aranesa y los intereses de los araneses y aranesas. Las actas de estas reuniones datan al 1838.

    Siglo XX: la recuperación de la autogobierno aranés

    La restauración de la democracia en el Estado en 1975 abrió la puerta a la recuperación del autogobierno. Durante la transición, en 1978, se creó la asociación “Es Terçons” para promover y recuperar la identidad como pueblo y la autonomía aranesa.

    Los trabajos llevados a cabo por “Es Terçons” permitieron que en el Estatut d’Autonomia de Catalunya de 1979 se incorporara una disposición específica para Aran.

    «En el marc de la Constitució i del present Estatut seran reconegudes i actualitzades les peculiaritats històriques de l’organització administrativa interna de la Vall d’Aran.»

    Disposición adicional primera de la Ley Organica 4/1979, de 18 de diciembre, d’Estatut d’Autonomia de Catalunya

    Este mandato estatutario asentó la base legal que permitiría más endeudando que el Parlamento de Cataluña promulgase una ley especifica para la Val d’Aran.

    Esta ley vio la luz en 1990. El parlamento catalán aprovaba la Ley 16/1990, de régimen especial de la Val d’Aran, que restauró formalmente las instituciones de autogobierno aranés abolidas en el siglo XIX y devolvió parte de los derechos privilegios adquiridos en 1313 con “Era Querimònia”.

    El Conselh Generau d’Aran se restableció junto con la figura del Sindic d’Aran como máxima autoridad aranesa. La ley, además, definió las competencias propias de Aran en materias como la cultura, la lengua, la sanidad, el territorio etc. Así como la financiación y relaciones con la Generalitat de Catalunya.

    A principios de 1991 se constituyeron los órganos provisionales y se organizó el proceso electoral que el 17 de junio de 1991 culminaría con la celebración de las primeras elecciones democráticas al Conselh Generau d’Aran, marcando la recuperación efectiva de la máxima institución aranesa 157 años después de su abolición.

    Las elecciones al Conselh Generau d’Aran recuperaban la división administrativa histórica de los antiguos terçons que acontecieron en las circunscripciones electorales para este proceso electoral. En total se eligen 13 conselhèrs.

    Sede del Conselh Generau d’Aran en la actualidad.

    Con el Conselh Generau d’Aran restablecido, se retomaba el autogobierno que databa de 1313. En los años posteriores, los diferentes gobiernos trabajarían para reforzar este autogobierno. Destacan hitos como: la elevación del reconocimiento de Aran como “entidad territorial singular” dentro de Catalunya en el Estatut d’Autonomia de Catalunya de 2006 o la ley 1/2015, que actualizaba el régimen especial de Aran.

    Estas labores fueron posibles gracias al nacimiento de la Asociación “Es Terçons” que tenía la voluntad de recuperar la identidad como pueblo y la autonomía aranesa, y de Unitat d’Aran, que durante décadas, se ha mantenido fiel al ideario de los Terçons para la consolidación del autogobierno aranés y el desarrollo de sus instituciones.

  • Ana Maria Tomás Palomeras

    Ana Maria Tomás Palomeras

    En esta edición de Voces de Aran queremos recordar a Ana María Tomás Palomeras, remarcando la importancia de su figura y de su labor, que aportó una mirada de género e interseccional indispensable en las políticas públicas y administraciones aranesas, en una época en la que las mujeres no acostumbraban a tener cargos públicos.

    En este sentido, queremos dar a conocer y dar visibilidad a la primera mujer con responsabilidad política de la historia reciente aranesa que, ya antes de la llegada de la democracia, fue designada alcaldesa del municipio de Es Bòrdes el 22 de julio de 1974. Responsabilidad que asumió nuevamente a partir de las primeras elecciones democráticas en el 1979 dónde fue escogida alcaldesa, y que abrió las puertas a cambiar el panorama social e histórico en el que vivíamos.

    Ana Maria, en su cargo de alcaldesa de Es Bòrdes, deseaba aumentar el nivel de vida de su municipio, promoviendo el turismo a la vez que persistía en la continuidad del sector primario. Fomentó la colaboración de todos los vecinos y vecinas, a quienes reunía a menudo para informarles, y poder conseguir así sus objetivos como servidora pública.

    Ostentó el cargo de alcaldesa de Es Bòrdes durante las dos primeras legislaturas democráticas hasta 1987, en las que se presentó por el partido de Unitat d’Aran. A lo largo de estas dos legislaturas trabajó para mejorar la vida de sus vecinos y vecinas. Entre su labor podemos encontrar la construcción del alcantarillado municipal y la llevada de aguas potables, la instalación de un teléfono público en los pueblos de Begós y Benós, y la reparación y adecuación de caminos vecinales, comadas y cabañas, y de carreteras como la de la Artiga de Lin. También se instalaron contenedores de basura en todos los pueblos del municipio.

    Además del trabajo y dedicación en y por su municipio, Tomás fue una persona comprometida con Aran y sus derechos históricos. Impulsora de la reinstauración del Conselh Generau d’Aran participando activamente en las reuniones que se llevaban a cabo, a través de los Terçons históricos, sobre todo del Terçon d’Irissa, del que pedía su reconocimiento como entidad jurídico-administrativa.

    Desde Unitat d’Aran queremos cerrar estas líneas remarcando su gran humanidad y su alegría contagiosa, pero sobre todo, su dedicación y participación en conseguir y consolidar una sociedad aranesa más progresista y social.

  • Mientras dure la guerra

    Mientras dure la guerra

    Mientras dure la guerra de Alejandro Amenabar. Un film que nos devuelve a uno de los momentos más marcados de la historia reciente de España, el verano de 1936.

    A través del punto de vista del célebre escritor Miguel de Unamuno, la película explora la difícil encrucijada moral de un hombre enfrontado a la violencia y al fanatismo. Éste, ve como sus ideas y convicciones se ponen a prueba, cuándo el caos político amenaza con tergiversar al país y restringir su libertad.

    Una reflexión profunda sobre el compromiso, la duda y la responsabilidad en tiempos de guerra, que invita a repensar como las decisiones individuales pueden marcar el curso la historia colectiva.

  • Joan Nart Garcia

    Joan Nart Garcia

    Joan Nart Garcia, nacido en Vielha el 21 de enero de 1950, estudió el bachillerato en la Escuela de Frailes de Vielha y cursó la carrera de ciencias químicas en Madrid, ejerciendo de maestro en la Escuela Joan March de Vielha en los años 70.

    En la etapa predemocrática fue escogido Presidente de la Asociación de Vecinos Es Terçons el 22 de septiembre de 1978. Con casi todas las casas de Aran presentes, Es Terçons nació con la voluntad e ideario básico de recuperar la identidad como pueblo y la autonomía aranesa, instando a la Asamblea de Parlamentarios de Catalunya, que redactaba en aquella época el nuevo Estatuto, a incluir el hecho diferencial de Aran. En este sentido, entre las funciones que llevó a cabo la asociación destacan el trabajo en la inclusión en el Estatut de Catalunya del hecho diferencial aranés para recuperar las instituciones propias de gobierno, en reparar el déficit histórico sanitario de Aran, en la planificación urbanística y en parar el plan forestal decenal. También acordaron participar en las primeras elecciones democráticas bajo el nombre de Unitat d’Aran, que recogió en su programa electoral el ideario y espíritu de “Es Terçons”. Es necesario remarcar el papel y el trabajo que Nart, entre otras figuras aranesas, realizaron.

    Joan Nart, dotado de una gran conciencia social y de una preocupación por el desarrollo ordenado del país, también promovió muy especialmente la redacción de las Normas Subsidiarias de Planeamiento de Aran, a través de su cargo como regidor del Ayuntamiento de Vielha y Mijaran las dos primeras legislaturas democráticas.

    Este hecho dotó al territorio de un Plan Director que regula los asuntos urbanísticos con la participación real y efectiva de todos los sectores y agentes sociales.

    Miembro fundador del partido Unitat d’Aran, fue escogido Presidente del mismo en el 1er Congreso de la formación política el 17 de noviembre de 1991 y ratificado una vez más como Presidente en el 2o Congreso el 11 de diciembre de 1999, cargo que ostentó hasta el 10 d’abril de 2004.

    Su trayectoria política en Unitat d’Aran se concretó ostentando el cargo de 1er Teniente de Alcalde en el Ayuntamiento de Vielha e Mijaran de 1979 a 1987. También fue Presidente del Consejo Comarcal de Montaña de Aran, siendo quien promovió el proyecto de potenciación y protección de la lengua aranesa.

    Como Presidente del Consejo Comarcal de Montaña, en octubre de 1983 y durante la visita del Presidente de la Generalitat de Catalunya, manifestó “Porqué, Sr. President, y este hecho aún no ha sido comprendido por las altas instancias de su Gobierno, la Junta de Alcaldes y los Consistorios araneses únicos representantes democráticos en esos momentos, tenían sobre sus conciencias la sagrada obligación de dejar claro ante la historia, una vez más, la inquebrantable voluntad de los araneses de recuperar sus derechos libertades e Instituciones de Gobierno, como expresión de su propia existencia y dignidad en clara similitud con la actitud de los parlamentarios catalanes que promovieron la reinstauración de la Generalitat Provisional, aun antes de que fuera aprobada la propia Constitución Española, que debía de amparar sus derechos”..

  • Aran impulsa un modelo energético sostenible con recursos propios

    Aran impulsa un modelo energético sostenible con recursos propios

    El mundo cambia de dirección. Los combustibles fósiles, protagonistas de la historia energética del último siglo, tienen fecha de caducidad. Europa marca el paso hacia una transición energética que prioriza la sostenibilidad, la independencia y la justicia climática. En este contexto, el gobierno de Unitat d’Aran en el Conselh Generau d’Aran han aprobado recientemente una normativa que regula la instalación de captadores solares para autoconsumo en todo el territorio.

    Como respuesta a la crisis climática global, las políticas europeas y nacionales se alinean para reducir drásticamente el uso de combustibles fósiles y acelerar la transición a fuentes de energía renovable. El objetivo es claro: conseguir la neutralidad climática en el 2050 y reducir, desde ahora hasta el 2030, al menos un 55 % de las emisiones de gases de efecto invernadero respeto a los niveles de 1990.

    La Unión Europea ha establecido una hoja de ruta ambiciosa que refuerza el pacto por una energía limpia, accesible y segura. Estas estrategias no sólo buscan mitigar el cambio climático, si no también aumentar la independencia energética de los Estados miembro y fomentar una economía más sostenible y competitiva.

    España, por su parte, también ha comenzado el camino a un modelo energético más limpio. El Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2023-2030 (PNIEC) establece objetivos ambiciosos: un 81 % de energía renovable en la generación eléctrica para 2030, una reducción del 32 % en las emisiones de gases de efecto invernadero respeto a 1990 y una disminución del 50 % en la dependencia energética exterior. Los recursos renovables tienen un especial potencial en el país, especialmente la energía solar y la eólica. Estos, convierten esta transición en una oportunidad real de crecimiento económico, cohesión territorial y generación de empleos de calidad.

    En este sentido, el Conselh Generau d’Aran ha aprobado una modificación normativa que permitirá a los ayuntamientos conceder licencias para la instalación de placas solares en los municipios que todavía no contaban con este marco regulador. Esta medida no sólo responde a una necesidad energética urgente, si no que también garantiza el respeto por el paisaje tradicional aranés, un valor patrimonial que se preserva con criterios técnicos y estéticos muy definidos.

    oAsí como señaló la síndica de Aran y secretaria general de Unitat d’Aran, Maria Vergés, esta actualización urbanística representa una apuesta firme con el derecho de la ciudadanía para acceder a energías renovables en su propio territorio. Con esta norma se quiere facilitar la incorporación de estas energías, cómo el autoconsumo solar, sin renunciar a la protección del paisaje aranés ni al respeto por nuestro patrimonio arquitectónico.

    Más allá de esta nueva regulación, el proyecto BOSCARAN, impulsado por el gobierno de Unitat d’Aran en el Conselh Generau d’Aran, con la implicación de la mayor parte de ayuntamientos del territorio y en colaboración con el Centro de Ciencia y Tecnología Forestal de Cataluña (CTFC), es un ejemplo claro de cómo el territorio puede contribuir activamente a la transición energética.

    Es necesario remarcar que este proyecto, financiado con una ayuda del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, promueve el uso del biomasa como alternativa al gas y al gasoleo, fomenta la gestión forestal sostenible y activa una economía circular basada en los recursos locales. A medio plazo, la biomassa forestal se presenta como una solución eficaz para cubrir las necesidades energéticas de Aran, reduciendo su dependencia de combustibles fósiles e importaciones.

    La transición energética en Aran no se limita sólo al aprovechamiento de la biomasa y la energía solar, si no que también plantea nuevos sistemas energéticos innovadores cómo la geotermia y district heatings.

    Concretamente, en la capital de Aran, Vielha, se trabaja en la implantación de este sistema de district heating and cooling que es vanguardista en el territorio y representa un modelo a seguir. Reduce la huella de carbono y la dependencia de energías fósiles y también mejora la eficiencia energética y contribuye a una economía local más autónoma. Se trata de una red urbana de frío y calor que combina la geotermia con otros recursos renovables para climatizar equipamientos públicos.

    El Valle de Aran demuestra que la transición energética es una realidad local, tangible, que se construye paso a paso desde el territorio. La desconexión del gas fósil, marcada por la Unión Europea, es una oportunidad para redefinir nuestro modelo de desarrollo territorial, económico y social y fortalecer nuestros recursos energéticos y avanzar hacia un futuro más limpio, justo y resiliente.

  • Salud y bienestar en el centro de las políticas

    Salud y bienestar en el centro de las políticas

    El gobierno del Conselh Generau d’Aran avanza en su compromiso con el bienestar de las personas en el ámbito social y sanitario. Un esfuerzo que va más allá de nuevas infraestructuras y que prioriza mejorar los servicios y su oferta, agilizar procesos y asegurar el acceso a derechos fundamentales como la salud y la atención a la dependencia.

    Nuestro sistema de salud y servicios sociales se consolida con proyectos como la remodelación y ampliación del Hospital Val d’Aran, con las fases 0 y 1 del proyecto ejecutivo activadas, y la implantación del Servicio de Atención Domiciliaria (SAeD) o el espacio de atención comunitaria especializada en Familia.

    En cuanto a al proyecto de remodelación del Hospital de Aran, no sólo se contempla el nuevo edificio, si no también la renovación integral del actual. Asimismo es necesario aplicar políticas para fidelizar profesionales sanitarios en el territorio y mejorar la financiación en esta área, reconociendo las especificidades y necesidades del territorio.

    Asimismo, se ha iniciado el proceso para ampliar las competencias en servicios sociales, lo que nos permitirá gestionar directamente, entre otras cosas, las declaraciones de discapacidad y dependencia. Hecho que representa un gran paso para reducir los tiempos de espera y ofrecer una atención más próxima, ágil y adaptada a las necesidades de nuestra población poniendo a las personas en el centro de las políticas.

    En definitiva, se apuesta por un Aran que adelante con una visión de futuro: un territorio donde vivir no sea un privilegio, si no un derecho, y la salud y el bienestar estén garantizados a todos los ciudadanos y ciudadanas.

  • Manifiesto del Conselh Generau Provisional de la Val d’Aran

    Manifiesto del Conselh Generau Provisional de la Val d’Aran

    El «Manifèst deth Conselh Generau Provisionau dera Val d’Aran» es un documento histórico que simboliza el deseo de recuperación del autogobierno y de la identidad propia de Aran.

    El Conselh Generau d’Aran, recuperado en el 1991 con la Ley 16/1990, representa la institución de autogobierno de Aran. Esta institución está formada por 13 conselhèrs elegidos cada cuatro años en las seis circunscripciones tradicionales, los terçons.

    El Manifiesto del Conselh Generau Provisionau está considerado un documento político e institucional clave en la historia reciente de la Val d’Aran, ya que representa la voluntad colectiva de recuperar y consolidar un autogobierno propio.

    A continuación encontraréis el documento original: